lunes, 26 de diciembre de 2022

Juan Idoipe, el último colchonero de las Cinco Villas.


 

Horizontes de grandeza... Juan Idoipe, "El Colchonero de Biota", Aragón, el Ultimo Colchonero de las Cinco Villas, hace unos años... 
 
Juan Idoipe nació en Orés, mágico pequeño -gran- pueblo de las Cinco Villas. Siempre lo llevaría en lo más hondo de su corazón.
Como muchos, marchó del pueblo para prosperar en la vida, que se decía, y de este modo se encaminó a Piedratajada como tractorista de una gran finca llamada "Cocorro".
Todo iba bien hasta que en 1.967 falleció su mujer repentinamente, quedando Juan con dos niñas pequeñas, de apenas 3 años y 15 meses.
Marchó la familia a Biota con la Tía María y Juan empezó allí a hacer colchones, oficio que aprendió de unos familiares en Orés, antes de dejar su pueblo natal.
Empezó a labrarse buena fama y condición porque trabajaba muy bien y era un hombre prudente, honrado y, sobre todo, muy buena persona.
De este modo se recorría haciendo colchones toda la redolada y comarca, Ejea, Asín, Orés, Luesia, Biel, los nuevos pueblos de colonización... e incluso, esporádicamente, también acudió a Ansó y a Mediana.
En cierta ocasión le llamaron desde Lloret de Mar unos Señores con una gran y antigua casona de las que ya no se hacen. Le costearon el viaje y les hizo una veintena de colchones a la inglesa. 
 
Una de sus hijas, Chus recuerda con gran cariño a su padre...
"Me encantaba el silbido de la vara al varear la lana.
Aún puedo escucharlo para mis adentros. Cuando iba jugando con las amigas por el pueblo, lo oía y me acercaba y ahí estaba mi padre, vareando en el patio de alguna casa. Me veía y me sonreía, yo también.
Falleció en 2010, pero hasta unos pocos años antes estuvo activo, cada vez menos, porque la gente se cambiaba a los colchones de muelles.
Se decía "parar los colchones" y era un trabajo muy duro. Llegó a parar hasta 4 colchones en un día y eso era una paliza.
Hacía todo el proceso: marcaba las telas para que las señoras cosieran los ojetes, vareaba, colocaba la lana sobre la tela y cosía el colchón -normal o a la inglesa- y lo subía a la cama, ahí donde le decían.
En la foto, le ayudo a coser uno de los últimos que hizo, el mío."
 
Pequeñas -grandes- historias de uno de los nuestros, homenaje y memoria de gente de leyenda, de Juan, el último colchonero de las Cinco Villas. 
 
Gracias a Chus Idoipe Auria por la foto y por contarnos la vida de su padre.
 

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