Con buena -y disimulada- compañía ...en la magia de Yeba, recóndito y bellísimo rincón del Sobrarbe, Pirineo Aragonés.
Yeba es un pequeño -gran- pueblo de Ballibió (Valle de Vió), perteneciente al municipio de Fanlo, al sur del Macizo de Monte Perdido - Treserols y entre los emblemáticos Cañón de Añisclo, y Valles de la Solana y Ara.
Yeba, a 1.150 metros de altura, está situado en la cabecera del río Yesa y en la vertiente sur del Parque Nacional de Ordesa y Monte Perdido.
El término munipal de Fanlo lo forman además del propio Fanlo, Buerba, Buisán, el pequeño despoblado de Gallisué, Nerín, Sercué, Vió, el ya tristemente arruinado y casi desaparecido Ceresuela y Yeba.
En este fascinante valle también se encuentra Moriello o Morillo de Sampietro, pero pertenece al municipio de Boltaña.
Estamos en una de las zonas más castigadas por la despoblación no solo del Pirineo Aragonés sino de todo Aragón, aunque en las últimas décadas y años algunos de estos pequeños pueblos reviven gracias a un turismo de montaña de calidad.
Es el caso de Yeba, que aunque pasa por ser uno de los pueblos más desconocidos de la zona, ha conseguido mantener, cuidar y mimar la casi totalidad de sus casas, intentando preservar en la medida de lo posible la arquitectura tradicional de la zona.
Sí, Yeba ha cambiado ... pero todavía conserva ese halo de la autenticidad y lo que es más importante, ha evitado el amasijo de ruinas en que se han convertido, desgraciadamente, muchos de nuestros despoblados.
Sirva de botón de muestra este hermoso camino murado que se dirige al sur y que discurre por paso cubierto abierto en magnífico pajar tradicional que todavía conserva la techumbre de losas y losetas.
A Yeba hay que ir de propio, se va o no se va... pero el que llega, ya no lo olvidará nunca.
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