"¿Qué haces aquí cruelísima bestia?"...le increpa San Martín al diablo en su lecho de muerte cubierto con una colcha de la "Señal Real de Aragón".
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Esta obra, considerada una de las piezas claves de la pintura mueble románica fue a parar al industrial con posibles y pocos escrúpulos L. Plandiura ...en una época en que la iglesia hacía y deshacía a su antojo y vendiendo lo que consideraba suyo y que era del pueblo... en esos aciagos días de principios del pasado siglo.
El tal Plandiura está considerado uno de los responsables de gran parte del expolio del arte medieval de la Ribagorza.
En 1932 atravesó malos momentos económicos y se deshizo del altar -y de muchas otras de "sus" obras- ...y fue a parar a la denominada Junta de Museos de Barcelona.
"No pierdas el tiempo buscando cargos contra mí, porque no los hallarás. Ahora mismo mi alma entrará en el Seno de Abraham"...le reprende Martín al diablo... que en ese momento expirá con un rostro dulcemente resplandescente.
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