Con las gentes del campo, los mejores pronosticadores del tiempo... solo con mirar las nubes.
Hoy, como cada 23 de marzo y desde 1997, se celebra el Día Meteorológico Mundial.
Este día se estableció para conmemorar la puesta en marcha de la OMM, Organización Mundial de la Meteorología, cuyo objetivo es asegurar el bienestar, protección y seguridad de los seres humanos que pueblan la tierra.
La meteorología es la ciencia que estudia todos los fenómenos que acontecen en la atmósfera de la tierra, como el clima, los vientos, la lluvia...
El cambio climático está provocando un negativo incremento de fenómenos adversos que ponen en riesgo la vida en el planeta.
Sequías e incendios, huracanes y tormentas de gran entidad y desconocidas en algunos lares con ese letal potencial, inundaciones...
Y es la conmemoración de este Día Meteorológico Mundial la que pretende crear conciencia en los gobiernos y ciudadanos del mundo de la importancia del cuidado y preservación que hay que tener con el clima y el medio ambiente para la continuidad de la vida.
El mismo cuidado que desde siempre han puesto los hombres y mujeres del campo, preocupándose por las señales del tiempo en el cielo y en los animales y procurando el máximo bienestar de los suyos y de sus ganados y abríos... tal y como pone de manifiesto el paisano de la fotografía en Bañón, hace unas décadas y que me sirve para poner imagen a esta publicación.
Bañón es un pequeño -gran- pueblo de la Comarca del Jiloca... Teruel Existe, Resiste y Enamora.
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