En un rincón con poesía y lírica de Fraga.
Detalles del alma, pasajes del corazón ... en un lento, detenido y disfrutable paseo por el Casco Histórico de Fraga, la capital de la Comarca del Bajo Cinca.
Tejas cocidas con el barro de la redolada, metódicos rafes de tradición morisca, el siempre entrañable azulete aragonés moldeado por los años, encalados de yeso, adobes de agua, paja y arcilla, esforzados ladrillos y un hechizante balcón de madera con unos extremos superiores que me han recordado las mágicas piedras "casaderas" de algunas casas de los Pirineos.
Repisas -cuenta la tradición oral-, en las que cuando en esa casa había mujeres en disposición de casarse se colocaban pequeñas macetas con calas, albahaca u otras flores... como "señal".
En las fiestas las rondas rondaban a las mil maravillas esas casas y de esas piedras y esas flores surgían historias mil.
Esta es la mía... y que cada uno cuente, si quiere, la suya.
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