"El Gran Profeta" ...
en la magia del Patio del Palacio de Argillo (s.XVII), hoy Museo Pablo Gargallo de Zaragoza.
El Palacio de los Condes de Argillo de la Plaza San Felipe de Zaragoza fue originariamente la casa nobiliaria del infanzón zaragozano Francisco Sanz de Cortes.
Su gran prosperidad (fue nombrado incluso Marqués de Villaverde) le llevó a ampliar su casona con una nueva fachada y este gran patio interior entre los años 1659-1661.
Estas reformas dieron como fruto un magnífico edificio representativo de la arquitectura civil aragonesa en plena transición del Renacimiento al Barroco.
El espacio del gran patio central, de apariencia cuadrada pero realmente rectangular, destaca por ocho monumentales columnas aragonesas (con anillo a un tercio de su altura) de marmol jaspeado que sustentan las hermosas galerías de arquillos de la planta superior.
Para ello se empleo piedra de Calatorao (para basas, anillos y capiteles) y alabastro de Épila (para los fustes).
El hueco del patio lo corona un friso de madera tallada que fue bajada por el río Aragón en navatas desde Villanúa.
Este tipo de patios interiores eran abiertos y recibían para su iluminación la luz natural, aunque actualmente esté cubierto.
El suelo conserva parte del empedrado de cantos rodados que nos lleva a imaginar el trajín de aquellos años provocado por los carros y caballerías.
Con el tiempo, en 1.837, el palacete pasó, por herencia, a manos de la Condesa de Argillo (de ahí la denominación por la que es conocido).
En 1.860 el Palacio de Argillo fue reacondicionado para servir como Colegio de San Felipe hasta que en 1.946 fue vendido a la ONCE, que instaló en él su sede.
Finalmente fue adquirido por el Ayuntamiento de Zaragoza para a partir de 1.985 destinarlo a Museo dedicado a Pablo Gargallo.
La obra que preside el patio es del genial escultor aragonés de Maella, Pablo Gargallo.
"El Profeta" o "El Gran Profeta" es una escultura de tipo cubista realizada en 1.933.
"El Profeta" representa un orador en actitud de gritar, con el brazo levantado, mientras sujeta un amenazante bastón como queriendo arengar y advertir a los que le escuchan de lo que está por venir.
El Profeta, escultura de tipo expresionista situada entre lo mítico y lo religioso, es uno de los trabajos maestros de Pablo Gargallo y está considerada como una de las obras cumbres de la plástica contemporánea.
Un paseo audiovisual por la historia del Palacio de Argillo, hoy Museo Pablo Gargallo de Zaragoza
Un paseo audiovisual por el Museo Pablo Gargallo de Zaragoza
Un paseo audiovisual por la vida y obra de Pablo Gargallo
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