Con la espectacular y rojiza portada en escénico "arco triunfal" que daba al acceso al Monasterio de las "Bernardas", antiguo monasterio cisterciense femenino fundado en 1168.
La fachada - portada (construida en piedra sillar rodena y ladrillo-) se halla en la misma Plaza Mayor de Trasobares y conserva un pasadizo con recorrido en quiebro de claro carácter defensivo, por el cual se accede a la Plaza de Violante de Luna.
Cuenta la leyenda, cuenta la historia ...que, en su afán de derrotar a los musulmanes del Valle del Ebro, el rey aragonés Sancho Ramírez, allá por el año 1092, marchó a Castilla en busca de aliados.
Se dice que el viaje lo hizo de incógnito y acompañado únicamente por sus criados.
Y lo que es el caso... cuando llegaron a estas tierras -entonces bajo dominio del poderoso reino taifa de Zaragoza- se perdieron con el grave peligro que la situación entrañaba.
Suerte que por allí se encontraron con tres leñadores cristianos que les ofrecieron refugio y comida.
Mientras dormía el rey, cuenta la tradición, que se le apareció la mismísima Virgen María rodeada de ángeles en medio de una gran iluminación.
Cuando acabó el prodigio, hallaron en el lugar de la aparición una imagen de madera que el rey llevó, una vez terminada su expedición a Castilla, al monasterio de Siresa, en pleno Pirineo.
Con el tiempo sería su hijo el rey Alfonso I El Batallador quien al reconquistar el lugar de Trasobares, entonces llamado "Trium Obantium" o "Tres Obares" (Tres vencedores), en recuerdo de aquellos leñadores que salvaron a su padre, Sancho Ramírez, devolvería la imagen de la Virgen al mismo lugar donde apareció... edificándose una pequeña ermita para venerarla y punto donde con el tiempo se fundaría el monasterio.
El monasterio fue fundado en 1168 por doña Toda Ramírez (dama castellana abadesa de Santa María de la Caridad de Tulebras) para el retiro de hijas de «ricos hommes» de Aragón.
El complejo monacal fue levantado en un privilegiado lugar a orillas del río Isuela, de los que aún quedan numerosos restos.
En la misma Plaza Mayor queda la iglesa parroquial -que en origen fue el templo del monasterio- que todavía conserva tallas de la Virgen y restos románicos.
A escasos metros de la iglesia se encuentra, exento, el robusto y bellísimo campanario mudéjar edificado en el s.XVI.
Alrededor de la plaza interior y una vez pasado el arco-pasadizo se conservan numerosos edificios auxiliares del antiguo monasterio y hoy reconvertidos en viviendas.
En los exteriores que dan al río también se pueden ver muros perimetrales del antiguo cenobio.
Y sobre la monumental portada luce el escudo de Trasobares... auténtico tesoro escondido en las faldas del Moncayo, Sierras Ibéricas Zaragozanas...Comarca del Aranda.
No os lo perdáis.
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