Tocando el cielo...con la bellísima y mágica Torre mudéjar de Báguena, en los luminosos cielos de Teruel.
La Torre de la Iglesia de Nuestra Señora de Báguena fue levantada entre 1609-1611, coincidiendo, curiosamente, con la expulsión de los moriscos ordenada por Felipe II de Aragón (Felipe III de España), uno de los peores reyes de la historia, que ya es decir.
La torre está formada por cuatro cuerpos, siendo los superiores de ladrillo y el inferior de planta rectangular y piedra sillar. En su interior se abre una sala abovedada con crucería sencilla cuya clave está decorada por el escudo barrado de la Monarquía aragonesa.
El importe de contratación de la obra fue de 15.000 sueldos jaqueses, moneda de cuenta usada en la Corona de Aragón.
En origen, el último cuerpo de la torre fue semiesférico y tuvo que ser sustituido por el actual, con su chapitel de cerámica vidriada, en el siglo XVIII debido a las frecuentes y costosas labores de reparación que sufría.
Los ladrillos de esta última obra fueron humedecidos con pan y vino para darles el color adecuado, así como los de la piedra, traída de Bea, en las Sierras de Cucalón y Fonfría, y el yeso de Navarrete del Río, al lado de Calamocha.
En la torre resultan curiosos los medallones renacentistas representando bustos masculinos, unos sin pelo y otros con abundante pilosidad, que nos recuerdan a los de la Lonja de Zaragoza.
En la decoración de la torre, los ladrillos juegan mágicamente con rombos, hexágonos o lacerías que se mezclan con arquillos o cruces...
Báguena es un pequeño -gran- pueblo de la Comarca del Jiloca... Teruel Existe, Resiste y Enamora !!
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