Antes de que todo desaparezca, traigo por aquí lo que aún subsiste del que fue el Batán de Albalate del Arzobispo, a orillas del río Martín.
En el ancestral y laborioso proceso de la lana que comenzaba con el esquileo de las ovejas hasta transformarla en tejidos y vestimentas... el batán, gran ingenio hidráulico, jugaba un papel fundamental.
El batán era la maquinaria donde, para entenderlo rápida y coloquialmente, unas lanas deshilachadas salían casi como "mantas inmaculadas" gracias al golpeo continúo que sobre ellas ejercían unos mazos, movidos por la fuerza del agua.
El Batán de Albalate del Arzobispo debió de ser importante a juzgar por la gran edificación que lo albergaba. Una de ellas, rectangular y de tres plantas, que tuvo que servir también para vivienda del batanero.
Se conserva la tajadera sobre la acequia que conducía el agua al Batán pero la maquinaria ha desaparecido.
Para comprender el proceso de trabajo de un Batán es de interés acudir al único batán restaurado conservado en Aragón: El Batán de Lacort, hoy en día en Fiscal, en el Pirineo Aragonés.
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