Con la magia de la Capilla del Santo Cristo que las gentes de Calatorao, Aragón, levantaron en solo 3 días...
Solo 3 días fueron los que tardaron los calatorenses en construir con piedra de Calatorao esta pequeña Capilla en el año 1.734.
Es aquí, según también cuenta la tradición oral, donde un ángel llegado al pueblo en forma de peregrino pobre y enfermo, talló la siempre venerada talla del Santo Cristo de Calatorao, como agradecimiento a que sus gentes le cuidaron con mimo y consiguieron sanarlo.
Dice la leyenda que el ángel-peregrino curado notó como la Iglesia no tenía Santo Cristo y se comprometió a tallar una imagen de él en poco tiempo.
Se encerró con un tronco y herramientas durante 3 días en una casa que había donde actualmente está esta Capilla para realizar lo prometido.
Cuando pasó ese tiempo los del pueblo acudieron a la casa para ver si había terminado la escultura pero ya no encontraron a nadie ni tampoco había instrumentos ni rastro de que se hubiera trabajado en ella.
Sin embargo, sí que estaba la impresionante talla de madera del Santo Cristo.
La llevaron a la Iglesia de San Bartolomé y con el tiempo el Santo Cristo cobró fama de milagrero y de sanar, sobre todo, a personas a las que la ciencia no encontraba remedio para sus enfermedades de la mente.
Por esto último, al Santo Cristo de Calatorao se le conoce como "El Cristo de los Endemoniados".
Ha existido y hay tanto fervor y devoción por el Santo Cristo de Calatorao que durante un siglo un tren salía desde Zaragoza y paraba en todos los pueblos para que la gente pudiera ver su imagen . Algunos lo llamaron "El Tren de las Endemoniadas", porque eran fundamentalmente mujeres las que buscaban la curación en aquellas visitas, en una época en que se mezclaba la religión con la superstición ya que se emparejaban los problemas mentales con la presencia del demonio.
La Capilla del Santo Cristo de Calatorao se cubre con una vistosa linterna y en su interior se puede ver el retablo original de su construcción, una talla del Crucificado con la Virgen y San Juan pintados a sus lados.
Sobre el altar se puede observar la entrañable talla del conocido como "El Mudico", que podría representar a San Antón y que es un ex-voto dedicado al Cristo de Calatorao por la concesión de algún tipo de gracia o milagro a un paisano de Paniza.
Además de las entrañables baldosas de toda la vida hay un arrimadero con cerámicas de gran belleza.
Capilla del Santo Cristo de Calatorao... hechizos en la Comarca de Valdejalón... Zaragoza.
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