A unos kilómetros de Camporrélls, en la Alta Litera, en un enclave de profunda magia y difícil acceso, resisten como pueden, junto a lo que fue el Castillo de Miravet, los restos de la Ermita románica de San Jaume.
Es la antigua iglesia de un despoblado medieval que junto con la fortaleza se debieron de construir, probablemente hacia el s.XI, en unos terrenos que Ramón Berenguer donó en el ya lejano año 1067 al caballero Mir Isarn y su esposa Almodis.
Miravet debió de subsistir hasta el s.XV cuando la peste obligó a sus habitantes a huir a poblaciones cercanas como Camporrélls y Estopiñán del Castillo.
Ya nunca más se repoblaría el lugar, aunque hasta la Ermita aún se subía hasta avanzado el s.XX para celebrar un tradicional encuentro el Día de Pascua.
El templo constaba de una sola nave cubierta con bóveda de cañón de perfil semicircular. La cabecera, pies y parte baja del muro norte están realizados por pequeños sillares de caliza muy bien tallados y dispuestos en aparejo regular. En el muro de poniente se conserva ventana de doble derrama y las bases de los montantes de la desaparecida espadaña campanario.
Se conserva milagrosamente entero el ábside gracias a un fajado con cables y tensores de acero y una estructura de madera que acusa, peligrosamente, el paso del tiempo.
El ábside apunta al este y está precedido por un arco presbiterial y cubierto por bóveda de horno. Se adivinan sobre el enlucido, vestigios de decoración pictórica de tipo geométrico a base de sencillas líneas rojas.
En su centro se abre una ventana de arco de medio punto monolítico y de doble derrame.
En el muro norte aún se ve una pequeña puerta en arco de medio punto que bien podría ser la original del templo.
En el s.XIV se debió de ampliar la ermita con dos capillas laterales cubiertas con bóvedas de cañón apuntadas dando al templo una nueva fisonomía de planta de cruz latina.
Aguanta uno de los arcos, aunque los maderos que lo hacían posible actualmente están ya en el suelo.
Aunque la Ermita ha perdido la cubierta y del muro sur prácticamente no queda nada aún conserva todo lo esencial de una valiosa obra románica de finales del s.XI - principios del XII, fiel a las formas constructivas de la evolucionada arquitectura lombarda de la época pero sin sus elementos ornamentales.
Aún se está a tiempo de recuperar el templo románico y en el peor de los casos, de consolidar la bellas ruinas que todavía podemos disfrutar a día de hoy.
Para llegar hasta aquí no hay camino ni señalización alguna y hay que localizar en la sierra que une los términos de Camporrélls con Estopiñán del Castillo el punto donde se encuentran en lo más alto de ella los restos del Castillo, Ermita y Despoblado de Miravet.
La ascensión hay que hacerla como buenamente se sepa o se pueda, por terreno boscoso y vestido con gran vegetación.
Despoblado de Miravet ... en Camporrélls, La Litera, Alto Aragón.
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