Carpintero trabajando con aquellas máquinas que no permitían el más mínimo error... El que lo cometía lo pagaba caro.
Carpintero trabajando con aquellas máquinas que no permitían el más mínimo error... El que lo cometía lo pagaba caro.
Mágico embellecimiento rural en un auténtico pueblo de cuento. Viva Codos !! No os lo perdáis !! Comentarios en Facebook
No hay comentarios:
Publicar un comentario